domingo, 2 de agosto de 2015

2-8-2015 Yogyakarta: Templos de Borobudur y Prambanan

Ayer me fui a la cama pronto, pero no sirvió de mucho porque no podía dormir, quizás el café y té que he tomado durante el día, o la luz que entraba del patio o pueda que fuera el ruido del aire acondicionado... creo que lo peor fue el dueño de la Guestahouse, un gordo inglés sin camisa que estuvo hasta aproximadamente las dos de la madrugada en el patio hablando posiblemente con su país por Skipe o algo similar sin auriculares y expeliendo fuertes eructos, salí de la habitación sobre esa  hora para fumar un cigarro y el hombre me dio los buenos días, seguramente algo borracho, yo le dije que estaba intentando dormir... Al parecer me hizo caso. Por otra parte hay que decir que los que deben ser su mujer e hijos indonesios son encantadores... Parece mentira... Igual no!!! Pese a todo la guesthouse tiene mucho encanto.

Lo curioso es que esta mañana a las 4,30 cuando yo he salido a tomar una café para esperar a que me recogieran, este hombre ya estaba de nuevo en el lounge desayunando, se ve que no duerme, además se oian en toda la ciudad las llamadas a la oración de forma bastante estruendosa que al parecer empiezan a esa hora, así que ya veremos si mañana duermo o no. El hombre, que tenía la misma cara de borracho que anoche ha eructado de nuevo, si bien esta vez ha dicho "sorry" y hemos tenido una corta conversación mientras esperaba mi transporte. Tras recoger a 10 personas, incluido una pareja española en diversos hoteles hemos iniciado el camino hasta el recinto de Borobudur, donde hemos llegado sobre las 6 y hemos desayunado.

Hoy es domingo y hay muchas familias indonesias con niños lo que dificulta el ya complicado ascenso al templo con estrechas escaleras y altos escalones.

A contraluz resultan impresionante las estupas.

Del complejo lo único y especialmente  sobrecogedor por su grandiosidad es el templo, realmente impresionante, enorme y bien cuidado pese a sus 1.200 años de antigüedad y las erupciones volcánicas y terremotos que cada poco tiempo sufre, los últimos en 2006 y 2010 respectivamente, que obligaron a ingentes trabajos de reconstrucción y es que hay que tener en cuenta que la isla de Java es de las zonas del mundo con mayor actividad sismológica. A pocos kilómetros a la redonda se encuentran varios volcanes activos. La rehabilitación quizás no acabe nunca. Aeemas parece que no cuentan con recursos suficientes para mantener el resto del complejo.

Estas son parte de la balaustrada que rodea el recinto y que cayó con la última erupción.

Lo más original del templo y la imagen icónica que más se conoce, es la parte superior con una estupa central y otras más pequeñas alrededor con una forma muy característica que nunca he visto en ningún lado y que hacen de este templo diferente al resto de los recintos budistas de Camboya o Sri Lanka. Aquí dicen que es el templo budista más grande que hay en el mundo, posiblemente así sea, no como complejo histórico pero si como edificio budista.

Este joven muchacho colabora activamente a que se mantenga la estupa en pie.

Al acudir hoy muchos indonesios por ser festivo ocurría que algunos de ellos solicitaban hacerse fotos con los occidentales e incluso a mi me han pedido posar con ellos en tres ocasiones, posiblemente son gente que vive en pueblos pequeños y que no han visto nunca a un occidental fuera de la televisión o el cine. Si es cierto que las chicas rubias eran las más solicitadas.

Estas estupas, que yo sepa, sólo las puedes ver en este complejo.

Este Buda deja constancia de la confesión del templo.

Imagen de los alrededores del templo, al estar rodeado de montañas tienen una vegetación exhuberante.

Aquí me dejo ver con el protagonista.

Otra vista con uno de los volcanes al fondo.

Imagen del remate del templo.

De entre los muchísimos bajorrelieves que había, éste es el que más ha llamado mi atención pese a ser uno de los más sencillos.

Salida del último ascenso.

Tras dos horas y media de visita tocaba ir al otro complejo del día, Prambanan. También está cerca de Yogyakarta pero al Noreste, Borobudur està al Noroeste, por lo que como las comunicaciones no son lo mejor del país el camino consistía en volver a la ciudad, cruzarla, posiblemente por el Norte, y superar cada cruce con largas retenciones ya que no existen túneles y apenas un par de puentes, así que nos ha costado unas dos horas largas llegar a Prambanan.

Entrada al templo principal.

Este templo que apenas es 50 años mas moderno que el otro es sin embargo hindúista y no Budista aunque mantiene las formas de los clásicos templos en honor a Buda. Sufre tanto o más que Borobudur el acoso de los terremotos y erupciones volcánicas por lo que también está en constante rehabilitación y los otros tres templos del complejo están casi destruidos.

Me estoy aficionando a esto del selfie y aunque llevo también el palito prefiero utilizar el sistema más tradicional.

Otro tema que sorprende, no sé si son coreanos o japoneses, es que utilizan tan profusamente el famoso palito del selfie que incluso lo utilizan para hacer fotos directas... ya sé que no tiene sentido pero no es algo raro ver como lo utilizan de esta forma.

Este es el volcán más próximo a este complejo que está bastante cerquita.


Todas las estructuras del templo están al mismo nivel del suelo.

Este es el único de los otros tres templos que aún se mantiene en pie y en el que están trabajando para devolverle su esplendor de antaño.

Los andamios son los típicos que se utilizan también en esta zona del mundo para las obras civiles.

Aquí solo hemos necesitado hora y media y hemos empezado la vuelta y reparto por los alojamientos de cada uno, a mi me ha tocado a mitad camino y ha supuesto poquito más de una hora.

No he querido hacer la siesta, pese a que apenas dormí una hora ayer, para intentar descansar mejor esta noche, así que he aprovechado para buscar mi transporte de mañana que finalmente será en autobús ya que ya no hay tren a Semarang, cambiar dinero, tomar una cerveza chateando un poco, ir a comprar champú...., además de escribir este blog que la verdad es que cuesta un montón de tiempo para lo cual me he sentando en el lounge de mi guesthouse donde ha aperecido de nuevo a cenar el dueño con la misma cara de borracho, por lo que deduzco que es su cara habitual, porque lo cierto es que no lo he visto beber hasta ahora. 

En el lounge de la Guesthouse.


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